Yolanda Atienza, Fisioterapeuta pediátrica
Eres docente en un centro educativo y al inicio del curso escolar te comunican que tendrás en tu aula un alumno
que presenta parálisis cerebral. Te surgen muchas dudas: cómo podrás trabajar con tu alumno, qué objetivos
te podrás plantear, cómo podrás evaluarlo, etc. y eso te genera una cierta inseguridad. Trabajar con un alumno con
parálisis cerebral es todo un reto, pero te resultará muy gratificante acompañarle en su proceso de aprendizaje. El
fisioterapeuta y el terapeuta ocupacional te darán asesoramiento y orientación.
En primer lugar, es importante mencionar que existe una gran variabilidad en la sintomatología que puede presentar un
niño afectado de parálisis cerebral. En este artículo puedes encontrar más información al respecto: https://www.nestlehealthscience.es/paralisis-cerebral-infantil/que-es.
Puede tratarse de un alumno que simplemente presente una ligera afectación de la movilidad y que, por ejemplo, solo
tenga una cierta inestabilidad al caminar, o bien puede ser un alumno con una importante limitación en sus
movimientos y que necesite una silla de ruedas para desplazarse. Cuánta más afectación motriz, más adaptaciones y
apoyos necesitará. Además, hay que tener en cuenta que algunos niños con parálisis cerebral también pueden presentar
afectación cognitiva y del lenguaje.
Cómo adaptar la clase para un niño con parálisis cerebral
El primer aspecto a tener en cuenta es intentar disminuir las barreras arquitectónicas del centro educativo,
sustituyendo escaleras por rampas o ascensor. Es importante adaptar todos los espacios, de manera que los pasillos y
las puertas sean suficientemente anchos para permitir que el alumno pueda desplazarse con su silla de ruedas o su
caminador. Hay que tener en cuenta su ubicación en el aula, para facilitar que pueda acceder a todos los espacios y
que el material que precisa siempre esté a su alcance.
Una buena postura corporal es importante para evitar malformaciones óseas y fatiga muscular y para mejorar el
rendimiento en la realización de las actividades escolares. Algunos niños con parálisis cerebral pueden necesitar
ayudas para mantener un buen posicionamiento sentados, pueden requerir una adaptación en la silla como un reposapiés
o el uso de un asiento de yeso o bien una mesa reclinable.
Recomendaciones y pautas para profesores
La meta principal es favorecer su desarrollo personal, su autonomía, el acceso a los aprendizajes y la participación en
las actividades escolares.
Algunas recomendaciones a tener en cuenta son las siguientes:
- Adaptar los objetivos y las actividades a las posibilidades del alumno, teniendo en cuenta sus necesidades y
motivaciones.
- Permitir que haga las cosas por sí mismo y ayudarlo solamente cuando sea necesario.
- Reforzarle positivamente por su esfuerzo, valorando más el intento que el éxito en la consecución de la
actividad.
- Todos los apoyos físicos que se le ofrezcan deben ser valorados continuamente para retirarlos a medida que vaya
adquiriendo más autonomía.
- Debido a que su procesamiento cerebral puede ser más lento, puede necesitar más tiempo para emitir una
respuesta. Es importante darle tiempo y no reponder por él.
- Evitar las actitudes sobreprotectoras.
Actividades escolares para niños con parálisis cerebral
Es fundamental que el alumno con parálisis cerebral pueda tener acceso a los aprendizajes y que pueda participar de
las actividades escolares junto a sus compañeros y compañeras. El niño con parálisis cerebral ha de ser uno más
en el aula. Para conseguirlo se utilizarán diferentes ayudas, adaptaciones y estrategias.
En ocasiones, será necesario adaptar los materiales, las tareas o los objetivos, disminuyendo la exigencia motriz de
la actividad y priorizando los aspectos cognitivos.
Utilizar la metodología cooperativa puede ayudar a la inclusión del alumno en las actividades del aula.
La tecnología como apoyo para el aprendizaje
La tecnología puede ser de gran ayuda para que los niños con parálisis cerebral puedan acceder a los aprendizajes.
Los niños con dificultades graves de lenguaje se pueden beneficiar del uso de un comunicador. Los niños que tengan
incapacidad para escribir con lápiz, pueden utilizar un ordenador. Existen multitud de accesorios que pueden mejorar
su funcionalidad, como el teclado adaptado, el teclado en pantalla, el ratón tipo joystick o de bola, etc. Además,
hoy en día muchas editoriales ofrecen los libros en formato electrónico. Para los niños con más problemas de
movilidad también hay programas específicos para facilitar el acceso al ordenador a través de la voz o con la
mirada.
Ante cualquier duda, consulta con el fisioterapeuta y el terapeuta ocupacional, los cuales te guiaran sobre las
ayudas necesarias, en función del grado de afectación motriz y cognitiva, teniendo en cuenta no solamente las
limitaciones, sino también las capacidades de tu alumno, para extraer su máximo potencial.